miércoles, 4 de enero de 2006

Inevitablemente ha llegado el día

Finalmente las profecías no se han cumplido y no ha llegado el fin del mundo al cumplir hoy los treinta tacos. Curiosamente no me siento muy diferente de ayer cuando tenía veintinueve; sigo sin haber acabado la carrera y trabajando en el mismo tugurio.
Aunque eso sí, tengo un monitor tft nuevo (gracias MJ) y calzoncillos y calcetines nuevos (gracias mamá); espero recibir algún regalo más en las próximas horas que me compense del trauma que significa para todo ser humano llegar a los treinta :-P

2 comentarios:

El Capitán dijo...

Hey longino! no me acordaba que fue tu cumpleanyos! Felicidades muy atrasadas! Bueno espero que pronto nos veamos, la semana que viene es posible que haya una cena grasienta en casa paquito...

El Tabernero dijo...

No sé Capitán, yo creo que en vez de cena grasienta pillaré un kebab vegetal, que hace un mes que no corro y estas Navidades no he conocido ni mesura ni vergüenza delante de la mesa